Toledo, 27 de septiembre de 2021.- La Sala de los Concilios del Arzobispado de Toledo ha acogido esta tarde la presentación de la segunda edición del libro ‘Los primados de Toledo’, que ha corrido a cargo del presidente de Castilla-La Mancha, y prologuista de este manual biográfico, Emiliano García-Page.
Durante su intervención, el jefe del Ejecutivo castellanomanchego ha destacado la capacidad de “escucha” que tiene la Iglesia católica, algo que en su opinión “es una ventaja frente a las encuestas que utilizamos los partidos políticos”, ha dicho. En este sentido, el presidente regional ha destacado su amistad con algunos prelados toledanos como don Marcelo, don Francisco Álvarez, don Braulio Rodríguez y el actual, don Francisco Cerro, al que se ha referido con especial empatía, respeto y cariño.
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Para el presidente de Castilla-La Mancha, la historia de este país va intrínsecamente unida a la de la Iglesia. Considera que una parte sustancial del Estado la conforman las creencias religiosas y, en el caso de España, la religión mayoritaria es la católica. De ahí que, a su juicio, sea importante que “quien quiera gobernar este país reconozca esta condición”, ha explicado.
“Del mismo modo que la Iglesia debe ser permeable, también creo que es un ejemplo en organización”, ha reconocido, convencido de que “seas o no creyente” es evidente que la Iglesia “se ha hecho valer en tiempos duros y difíciles”. A juicio del presidente García-Page, es “bueno que haya instituciones como la Iglesia y como la primatura de Toledo”.
A este respecto, tras reconocer la transcendencia del libro “Los primados de Toledo”, recomendar su lectura y considerar que es “un libro inacabado por definición”, se ha mostrado convencido de que en la ciudad de Toledo “estamos muy legitimados para hablar del Estado y de la Iglesia”.
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Del mismo modo ha ironizado con el hecho de que, tal y como está el Estado, “a la Iglesia le conviene la separación” y, ha recordado que en todas las acciones importantes que han tenido lugar a lo largo de la historia de España, siempre ha habido detrás un arzobispo de Toledo.
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