SER Toledo.-
La llegada de la época navideña va ligada a la realización de diversos belenes vivientes en diferentes puntos de España. En el caso de Castilla-La Mancha, dos de los que tienen mayor historia en la región son los de Galápagos (Guadalajara) y el de Moral de Calatrava (Ciudad Real). En ambos casos, llevan meses trabajando para que todo salga perfecto en sendas representaciones. Unas representaciones con las que transforman parte de estas poblaciones en la ciudad de Belén de hace varios siglos.
Publicidad:
El belén viviente de Moral de Calatrava (Ciudad Real) también sopla las velas de su 15 aniversario.
La localidad ciudadrealeña de Moral de Calatrava, cumplirá sus 15 años de vida desarrollando su belén viviente. Una iniciativa que surgió de un grupo de catequesis y que, poco a poco, ha ido involucrando a la casi totalidad de esta población de apenas 5.000 habitantes. En su caso, este belén se realizará el próximo sábado 16 de diciembre desde las 17:30 h.
Un belén viviente que vuelve con varias novedades, además de una ampliación del recorrido. Una recreación cuyo montaje se realiza durante la madrugada anterior y se desmonta en la misma noche de su realización. Todo ello, confesaba una de sus organizadoras, María José Rubio, porque este belén se realiza íntegramente en la calle y no puede entorpecer el día a día de esta localidad de Ciudad Real, más allá de las horas de su representación.
Publicidad:
El belén viviente de Galápagos (Guadalajara) cumple su XV aniversario
Por su parte, el belén de Galápagos ya ha vendido sus 3.500 entradas anticipadas, tal y como ha detallado una de sus organizadoras, Silvia Montalvo. Unas entradas que tienen un precio de tres euros. Sin embargo, recuerda que el día de la representación, este sábado 9 de diciembre, se venderán entradas en la taquilla desde las 17 h. Un belén viviente que, en esta ocasión, cuenta con hasta 13 escenas repartidas a lo largo del casco antiguo del municipio.
Belén que se desarrolla en patios privados, en las calles, y en diversas estancias de su bello palacio barroco de principios del siglo XVIII, tratándose de recrear y evocar la Anunciación de Dios al Ángel, la Anunciación del Ángel a María, la visita de María a Isabel, la llegada de José y María a la posada de Belén, la Anunciación a los pastores o la llegada de los Reyes Magos al Castillo de Herodes y la Adoración al Niño Jesús, entre otras representaciones.
Un recorrido que tiene una duración de una hora y que, tal y como ha avanzado Montalvo, cuenta con un narrador que va guiando a cada uno de los grupos.
Publicidad:
En total, esperan la llegada de unas 5.000 personas durante la jornada de este sábado, desde las 17:30 h. Unos pases que se van a desarrollar cada 10 minutos y que transforma completamente esta localidad de poco más de 2.000 habitantes «hay gente que ni siquiera reconoce al pueblo».
