Mª Dolores López-Tercero Sánchez.- El próximo miércoles, 20 de abril de 2022, se cumple un lustro desde que se firmó la primera parte del Hermanamiento con la localidad abulense de Piedralaves.
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Quizás para muchos quede algo lejano en el tiempo, pero hace apenas cinco años estábamos inmersos en la actividades que celebraban el II Centenario del hecho prodigioso de Fray Julián de Piedralaves, fraile franciscano natural de Piedralaves que, durante el siglo XIX vivió en el convento, ya desaparecido, de la Orden de San Francisco de Asís y que protagonizó el Milagro de la lluvia tras meses de duras sequías y penurias.
Para todo aquel que no sepa, o no recuerde muy bien, qué ocurrió en aquel acontecimiento, porqué hubo aquí un convento franciscano y la razón que motivó a que se llevase a cabo el presente Hermanamiento del que tratamos en estas líneas, les invito a leer el libro publicado en 2017: Moral de Calatrava entorno al hecho prodigioso de 1817, donde se detalla todo esto, y algunos datos más.
Así mismo, también invito a todos los lectores, a navegar un poco por internet en busca de qué actividades fueron realizadas en 2017 para conmemorar tal hecho histórico.
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Desde aquel año, quedaba conformado, y firmado, el Hermanamiento entre ambos pueblos, la primera parte se llevó a cabo, como ya hemos citado, en Moral de Calatrava y, la segunda parte se formalizó en un evento celebrado en Piedralaves.
Tras esto, apenas celebraron otro evento conjunto ambas localidades, siendo la celebración de Mascarávila en la primavera del 2019. Dicho evento reúne diversos grupos de folclore de la provincia de Ávila, llevando como invitados a otros grupos nacionales, entre ellos, el grupo moraleño de Aires de Moral.
Por desgracia, para muchos ya ha quedado en el olvido este Hermanamiento que, con tanta ilusión, se firmó hace unos años entre ambos pueblos. Un acuerdo que podría haber traído muchos beneficios entre ambos, pudiendo promocionarnos, mutuamente, nuestros productos gastronómicos en nuestras respectivas provincias; hacer intercambios culturales, promocionando el turismo de ambos con viajes anuales; realizar actividades de naturaleza, como bien puede ser rutas senderistas o de bicicleta, promocionando, y conociendo, de este modo, el entorno y los recursos de Moral y de Piedralaves; intercambios entre las bandas de música, etc.
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Son muchas las opciones y actividades que podríamos realizar entre ambas localidades, y que podrían beneficiarnos, pues no hay nada mejor que el boca a boca” para despertar interés por conocer otros lugares, probar otras comidas típicas o consumir productos típicos de otras zonas.
Es entendible que, debido a la situación que llevamos viviendo desde el 2020, debido a la pandemia mundial de coronavirus, se hayan paralizado muchas actividades, y hayamos estado más enfocados a nuestro entorno más cercano pero, no debemos perder el contacto con otros puntos de interés y, es por ello, que creo ya es momento de volver a poner en funcionamiento ambas maquinarias y movernos para revivir este Hermanamiento.
No es necesario tener una excusa “relevante”, como podría ser la Ruta de Pasión Calatrava, declarada de interés turístico nacional, para “obligarnos” a hacer un encuentro oficial entre ambos ayuntamientos y pueblos, si bien sería una buena oportunidad.
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Cualquier momento es bueno para ello, pudiendo organizar un viaje de fin de semana donde se oferten actividades muy diversas: visitas guiadas, comidas tradicionales de la zona o visita a alguna empresa local relevante, entre otras muchas. Bien es cierto que hace mucho más el querer que el poder.
