Antonio M. Trujillo.- Tradicionalmente, siempre se ha venido celebrando en Moral de Calatrava (Ciudad Real), la fiesta de la Purificación de Nuestra Señora (2 de febrero) como día de esparcimiento en el campo, para comer las tradicionales tortas y hornazos de Candelaria.
El recordatorio que se imprimió para la ceremonia de bendición de la nueva imagen dice textualmente: «Recuerdo de la solemne bendición de la imagen de Nuestra Señora de la Purificación (Virgen de las Candelas), que tuvo lugar el día 19 de diciembre de 1968, siendo madrina de este acto religioso S. A. R. la Infanta de España Dña. María Teresa de Borbón Parma, actuando de Oficiante el Ilmo. Sr. D. Edistio Gómez Manzanares, Capellán de la Hermandad Nacional de Antiguos Combatientes de tercios de Requetés de España.
Mandada hacer esta Sagrada Imagen para mayor gloria de la Madre de Dios por Alfonso Felipe López-Valdepeñas en sufragio del alma de su esposa (q. e. p. d.) Purificación Sancho y Gómez-Manzanares, siendo celebrado este acto en su domicilio, Mártires, 15″.
A partir de esta fecha, comienza la imagen a procesionar con regularidad, no solo en su fiesta, sino incluso en Semana Santa, como Dolorosa. El resto del año permanecía en el oratorio propiedad de la familia que la adquirió.
Quizá por esta circunstancia o por tratarse de una imagen con poco arraigo popular, fue decayendo su devoción hasta que a principios de los años 80, dejó de salir en procesión.
Será a partir del año 2001, cuando la imagen de Nuestra Señora de la Purificación, vea de nuevo la luz pasando a ser venerada públicamente en el altar del lado del Evangelio en el crucero de la ermita de la Virgen de la Soledad, donde actualmente permanece.
Comentarios